Por tercer año consecutivo contamos con la presencia de la Dra. Ana Teberosky. Será la encargada de abrir esta III Edición con su ponencia: “A las maestras y maestros que enseñan a leer y a escribir…” Retomará los resultados de las investigaciones que llevo a cabo junto a la Dra. Emilia Ferreriro. Sus estudios supusieron un gran avance en el conocimiento acerca de cómo los niños aprender a leer y a escribir y por lo tanto hacia dónde debe ir dirigida nuestra intervención docente. Sin duda, todo un lujo que un referente como ella confíe en esta línea de formación y nos acompañe año, tras año. ¡Gracias Ana!
Leer y escribir son claves para nuestra vida. Gracias a ello, accedemos a la información que necesitamos, aprendemos sobre el mundo y disfrutamos de la belleza que nos ofrece la literatura…Además, cuanto más leemos y escribimos, cuanto más variado es el contenido y más hablamos sobre ello, mejor nos relacionamos, comprendemos más y mejor a los demás y la realidad. Leer y escribir es una actividad necesaria y primordial. Por ello, debería ser contenido didáctico, fundamental para todo aquel que se dedica a enseñar, sea lo que sea, porque siempre necesitará del lenguaje oral y escrito para poder tratar contenidos de cualquier naturaleza.
Cuando comprendemos cómo un sujeto puede aprender a leer y a escribir, entendemos qué es leer y escribir. El mismo proceso de aprendizaje de la lectura y la escritura nos descubre la actividad intelectual que conlleva y nos previene de la presunción de que sea un simple acto mecánico consistente en codificar y descodificar cuya velocidad depende de la frecuencia con que llevamos a cabo la práctica.
Cuando comprendemos cómo se aprende a leer y a escribir, entendemos que se trata de un proceso de construcción de aprendizaje donde el aprendiz resuelve y cambia de posicionamiento en tanto en cuanto se van confirmando y descartando hipótesis de escritura. No es pues, un proceso lineal, secuenciado ni progresivo. El contexto y el significado son cruciales es decir, el poder dar sentido a lo que se lee y se escribe es determinante para producir, o sea, se trata de comprender. Y para comprender es importante hablar y compartir lo escrito y lo leído, y así, poder interpretar. Comprender e interpretar están asociados al aprendizaje de la lectura y la escritura. No leemos y escribimos si no comprendemos.
Así pues, el profesorado de los últimos cursos de primaria, secundaria e incluso de la universidad, a pesar de lo que manifiesta en los cursos de formación(«yo no puedo perder el tiempo enseñando a leer y a escribir») enseña a leer y a escribir porque enseña a comprender y a interpretar, porque ayuda a leer, a escribir y a hablar … ¿o no?
Este contenido queda muy bien plasmado en los escritos de la Dra. Teberosky que no solo explica muy bien su investigación sino que también explica en la práctica, su repercusión.
Por cierto, como vemos, Ana Teberosky y su equipo de trabajo estarán en Alcañiz, en el curso de la Unversidad de Verano, Cómo iniciar los cambios en educación. III Edición.
https://fantoniogargallo.unizar.es/curso/2019/como-iniciar-los-cambios-en-educacion-iii-edicion
Leer, escribir y hablar para cambiar 
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